Counselors, trabajadores sociales, psicoterapeutas y médicos utilizan con frecuencia las palabras "relación de ayuda" para caracterizar los servicios que proporcionan. Sin duda la expresión tiene significado para quienes la utilizan, pero ¿lo tiene también para las demás personas? La frase "una relación de ayuda” es engañosamente simple; la mayor parte de la gente entiende que "ayudar” quiere decir prestar auxilio o colaboración y que "relación" significa algún tipo de vinculo o de referencia entre dos o más persona. Pero aunque muchos individuos —los vendedores de calzado o de helados, los banqueros y los políticos— se ocupan de proporcionar servicios que tienen las características de una ayuda, pocos de ellos utilizan los términos ''relación de ayuda" para describir su tarea.
La Naturaleza de la Relación de Ayuda
Estamos invirtiendo talento y sumas de dinero sin precedentes para hacer posible que la gente viva más y mejor, para poder disfrutar del tiempo libre y aprovechar plenamente las posibilidades brillantes que abre la tecnología. Pero la posibilidad de que la gente sobreviva v mejore depende de que se resuelvan las diferencias que los hombres tienen consigo mismos y con su prójimo. Es de esperar que mientras la atención del hombre se dirige hacia la máquina, se produzcan cambios que enriquezcan fundamentalmente sus relaciones con sus semejantes y hagan posible el auténtico mejoramiento de la vida.
La Necesidad de una Relación de Ayuda
A pesar del progreso tecnológico subsisten los problemas esenciales y permanentes del hombre: ¿Quién soy yo? ¿Cómo llegué a ser lo que soy? ¿Soy normal? ¿Qué es el bien? ¿Qué es la realidad? ¿Cuál es el valor de la vida? ¿Cómo puedo llegar a ser más productivo... más sensible… más sensato... mal vital? Los sueños, los impulsos, los intereses y la humanidad del hombre pueden observarse en una variedad asombrosa de situaciones de conducta.
Algunas personas, de acuerdo con las pautas de su cultura, suelen considerarlos como cosas más o menos obvias. Otras muestran gran ansiedad e incertidumbre porque en cada uno de esos momentos se pone en juego su destino, en consecuencia, los hombres no están dispuestos a permitir que el resultado se produzca por azar, sino que buscan ayuda para enfrentar estas crisis.
Múltiples fuerzas significativas e internas actúan tanto para impedir como para facilitar la definición y la percepción que tiene el hombre de su mundo y de sí mismo. Porque se siente frecuentemente angustiado, ineficaz, perplejo, ansioso, perturbado o ignorante de sí mismo y de su mundo, se vuelve a otros para que lo ayuden a simplificar la realidad de modo que pueda manejarla eficazmente. Busca ayuda para comprender su propia conducta y la de los demás, sus relaciones con los otros, sus decisiones, sus elecciones, su situación, sus metas: su ser mismo. Busca ayuda para impedir o remediar las situaciones de tensión de la existencia.
Definición de la relación de ayuda
Cabe presumir que, cuando los Counselors, los trabajadores sociales, etc., utilizan la expresión "relación de ayuda” se refiere a sus esfuerzos, en la interacción con otra persona, por contribuir al mejoramiento de esta segunda de un modo positivo y que facilite su adaptación. Las profesiones de ayuda se dedican a actividades cuyo propósito es contribuir a que otros comprendan, modifiquen o enriquezcan su conducta de modo que se produzca una evolución.
Están interesados en la conducta de las personas su modo de vivir, de sentir, de conocer a otros— y en sus actitudes, motivaciones, ideas, respuestas y necesidades. La persona que ayuda no concibe a los individuos como "problemas de conducta” sino como personas que tratan de descubrir el sentido de la vida, que buscan sentirse cómodas consigo mismas y con los demás y responder productivamente a los exigencias del vivir.
Rogers ha definido así la relación de ayuda:
"Mi interés por la psicoterapia me ha llevado a interesarme también por todo tipo de relación de ayuda. Con estos términos quiero significar toda relación en la que al menos una de las panes intenta promover en el otro el crecimiento, el desarrollo, la maduración y la capacidad de funcionar mejor y enfrentar la vida de manera más adecuada. El otro, en este sentido, puede ser un individuo o un grupo. En otras palabras, podríamos definir la relación de ayuda diciendo que es aquella en la que uno de los participante intenta hacer surgir en una o ambas partes, una mejor apreciación y expresión de los recursos latentes del individuo y un uso más funcional de estos."
Con demasiada frecuencia se cree que la expresión “relación de ayuda" significa que una persona ayuda a otra. En muchos casos es efectivamente así, pero la expresión se aplica también a las interacciones entre un individuo y un grupo. Además, ciertas relaciones de supervisión y administración se cumplen de tal modo que pueden facilitar el máximo crecimiento mediante procesos que liberan las potencialidades del individuo.
Resumen propio Clr. Soledad Sarasúa
Fuente: Manual Para El Asesoramiento Psicológico (Counseling) Por Shertzer ; Stone.
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